Soy tuyo.

martes, 24 de diciembre de 2013

25D.

Un año, un jodido año y no sé por dónde empezar, si por lo mucho que nos queríamos o por lo mucho que la cagué. Un jodido año del ' que te quiero, te quiero de verdad de la buena.' Podría haber sido un año entero compartiendo momentos, broncas, madrugadas juntos, besos, abrazos, sonrisas, malos momentos y buenos, como todo el mundo tiene, pero bueno, ya sabes que no todo sale como uno quiere y que siempre hay un gilipollas de turno que lo jode todo. Pero quería que supieras que no me olvido de esta fecha, ni de ti, ni de los recuerdos ni de nada de lo que hemos vivido juntos, sí, de nuestras cosas, de nuestras tonterías, de nuestras canciones, de cosas que sólo tú y yo entendemos, nosotros. Joder, qué bien sigue sonando esa palabra. Sé que no es una noche fácil para ti, que no sabes lo que daría por darte un abrazo y decirte 'eh mongola, no te preocupes, que no han podido con nosotros.' Y créeme que para mí esta noche no es fácil, nada fácil, es la típica noche de deprimirte, ponerte todas las canciones tristes del mundo y llorar y llorar, y es que a veces viene tan bien llorar...  Lo siento de verdad, por todo, por todo el daño que te hice pero también de nada por todos los momentos que te he dado y todo el apoyo y sonrisas que te he sacado. Sé que no me olvidas, y yo a ti tampoco, y sé que en este día siempre te vas a acordar de mí, porque es nuestro día y eso no nos lo quita nadie, y que te quede bien claro. Que nuestras canciones tampoco, y que no olvides que soy el que mejor te conoce, ya sabes que eres mi alma gemela, mi mongola, mi luna reprimida, la chica de mi vida, la que me debe un viaje a Australia y una cena con gambas... No quiero que me olvides, ¿vale? pero sí que me recuerdes sin que te duela porque no quiero causar más daño del que te he hecho, y es que te quiero, te sigo queriendo, aunque pienses que soy un hijo de puta, y sé que tú a mí también, y que una parte de ti sigue queriendo que esto sólo sea una pesadilla y volvamos a ser los mismos de antes que nos queríamos como nadie. Quién iba a saber mejor que yo que tu número favorito es el 28, que combinas los números con colores, que te encanta el amarillo y el turquesa, que pones corazones amarillos como identificación tuya, que tu peli de Disney favorita es 'La Sirenita', que tu película de amor favorita es 'El Diario de Noah', que te encantaría llamar a tu hija así, que no e gusta la Coca Cola pero si el Nestea, que no puedes dormir sin antes tomarte un buen Nesquik, que odias a la gente que no lo escribe bien, que odias decir ''te quiero'' pero que si de verdad quieres no te cansas de repetírselo a esa persona, que te encantaría viajar a Australia y a Alemania, que una de tus canciones favoritas es I wouldn't mind de He is we, que darías lo que fuera por poder ves a Chris Brown en directo, que escuchas a Ambkor, Fase y Xenon desde que te lo recomendé yo, y más cosas que sólo tú y yo sabemos. Que si hace falta deprimirte hoy hazlo, te lo permito, que igual que tú hoy no puedes ser fuerte, yo tampoco, si hace falta ponte 'They don't know about us', pero sólo hoy por ser nuestro día, eh. Sólo te pido que espero que me leas, y que igual que lo nuestro fue tu mejor regalo de Navidad del año pasado, te prometo que este año tendrás un regalo, que quiero volver a alegrarte la Navidad y que espero poder conseguirlo, te lo prometo, feliz Navidad mongola, y feliz 25 de Diciembre, un año, un jodido año de ese 'te quiero de verdad de la buena', y lo peor de todo, es que sería un año siendo la puta envidia de todos. Te quiero.

lunes, 23 de diciembre de 2013

Bocas de metro son las únicas que beso.

Grabé mi voz diciendo: ''ya no puedo más'' en un cassette y lo introduje en un walkman antiguo. Era un día gris, la habitación estaba a oscuras, entraba algo de luz por debajo de la puerta y las rendijas de las persiana. Me tumbé en la cama, me puse los cascos a todo volumen y le dí al play. Esa frase se repetía en mi cabeza. Al principio cerré los ojos y pensé en todos los fallos cometidos, palabras que hicieron daño y no justicia, besos de hijas de puta, palmaditas en la espalda, ''ya te lo dije'', el pasado agonizando y mientras mi voz decía: ''Ya no puedo más, ya no puedo más, ya no puedo más.'' Las lágrimas recorrían mi cara como si fuesen a cambiar algo. Me levanté de la cama y empecé a golpear la pared, era consciente de que así sólo me hacía daño a mí pero no había nadie que me parase, así que ahí seguía, peleándome con la pared. Gritaba. No sé cómo había podido llegar a este punto. Ella me había vuelto loco pero no tanto. Cerraba los ojos y veía esa frase. Veía decepciones. Veía la palabra culpabilidad en todas las paredes. Escrita mil veces. Las ojeras ya iban hasta a reventarme. Ya no puedo más, ya no puedo más, ya no puedo más. Llegué a escucharlo una y otra vez, sin parar. Y todo el pasado seguía reviviéndose en mi cabeza. La palabra culpabilidad se iba evaporando y empezaba a escribirse letra a letra la palabra cobardía. Por no plantar cara a mis contratiempos estaba así. Mi vida era una continua huida, y ahora tenía la cobardía de decir ''ya no puedo más'', ''ya no puedo más'', ''ya no puedo más'', ''ya no puedo más'', ''ya no puedo más'', ''ya no puedo más'', ''ya no puedo más.'' Me arañé la cara. Sangraba. Me miraba al espejo y me daba asco, me odiaba. Como siempre, lo solucioné con un puñetazo en el cristal, qué iluso, como si éso fuese a mejorar algo o a cambiar este desastre.

sábado, 7 de diciembre de 2013

Me flipa beber solo, soñar que arreglo el mundo.

Deja de decir que vas a estar siempre ahí cuando sólo estás en los buenos momentos y en los malos desapareces. Deja de decir que nunca te vas a ir si a la mínima de cambio te largas. Deja de decir que tengo su hombro para llorar si nisiquiera tengo un puto abrazo. Que a veces la vida es tan hija de puta con nosotros que no necesitamos a nadie que nos diga que todo va a salir bien, a veces sólo necesitas un abrazo aunque sepas que todo se va a ir a la mierda. Y es que quizás, la culpa de que me haya vuelto tan frío como persona la tengáis cada uno de vosotros, porque uno no puede estar viviendo siempre de decepciones, de malos momentos, porque todos necesitamos un puto punto de apoyo aunque al segundo te caigas, lo importante es que tenga los huevos de levantarte 93842 veces más. Y es que estoy cansado de que la gente diga que todos tenemos un motivo para ser feliz, porque es la mayor tontería que he escuchado nunca, estando solo no tienes ni uno. Porque hay personas que se refugian en el alcohol para olvidar, otras en el tabaco para fingir... pero de qué sirve, al día siguiente todo va a seguir igual, día a día la misma mierda. Y es que las personas que llaman a otras frías no tienen ni idea de lo que realmente significa esa palabra, porque la frase exacta es: ''Claro que siento, lo que me habéis quitado son las ganas de demostrarlo.'' Porque todos llevamos vidas de mierda. Vuestro problema es que pensáis que la de los demás es perfecta. Todos nos hemos sentido solos alguna vez, todos hemos creído que el mundo se nos venía encima cuando esa persona ya no estaba, todos hemos sido un poco más hijos de puta porque alguien nos ha hecho daño, pero por dentro seguimos siendo los mismos gilipollas que seguirían dándolo todo por esa persona que nos ha hecho pedazos, ¿o me equivoco? Todos hemos bebido hasta el punto de creer que hemos olvidado a esa persona, y al rato volvíamos a llorar por ella, y es que parecemos tan tontos esperando algo que sabemos que nunca va a llegar... Pero es que realmente la gente con verdaderos motivos para llorar suele estar siempre haciendo reír al resto, y los demás falsos tristes de mierda. Porque no sabéis lo triste que es acostumbrarse a estar solo. Pero supongo que en eso consiste la vida, que unos se van, otros se quedan, y que tú no puedes hacer nada contra éso, tan sólo echar de menos... Y que las personas no se pierden, las personas se van. Lo que se pierden son las ganas de conocer a otras.

jueves, 5 de diciembre de 2013

'Forever is a long time...'

Hoy hace un jodido año ya de nuestra primera noche de empalme, que me la suda quién diga que es una gilipollez y quien diga que no, un año de tu ''llevo 15 horas hablando con él y aún no me he cansado'', yo creo que mi problema siempre ha sido intentar superar una piedra con la que me voy a tropezar siempre por el camino, quizás hay personas que nunca se superan y recuerdos que nunca se olvidan, hace un año de la luna reprimida y la mierdecita feliz, un año del anillo con patas, un año de darnos cuenta que éramos como almas gemelas pero sin el ''como''. Un año del ''deja de hacerme reír que invoco a mi madre''. Joder, qué tiempos, y aún me sigo arrepintiendo de todo el daño que te hice, y es que no sabes lo jodido que está siendo Diciembre sin ti, sin tus buenos días, sin tu apoyo y sin tus ''te quiero'' inesperados, y que a pesar de que digas que soy un gilipollas y que me jodan, pues aquí sigo, y siempre seguiré, supongo que es la promesa que te debo, te dije que siempre iba a estar ahí, y lo estaré, ya sea aquí, en Australia o en la Luna reprimida. Aún tenemos pendiente muchas noches de empalme que me prometiste, espero que no se te olvide, eh, así que espero que algún día cumplas. No sabía yo lo jodido que sería esto, pero es que es inevitable no acordarme de ti cuando suena nuestra canción, cuando estoy estudiando y sale Australia, o simplemente por cualquier mínima tontería, supongo que por muchos años y personas que pasen, no lograré superarte nunca, sólo espero que al menos reserves algún hueco para mí ahí en el de la izquierda, que tú ya sabes que en el mío, hay hueco de sobra. Te quiero, mongola.

martes, 3 de diciembre de 2013

Yo no busco chicas fáciles, sino chicas que fácilmente me hagan ser feliz.



''Dicen que en boca cerrada no entran moscas, que tres son multitud y que donde caben dos caben tres. Que iban dos y se cayó el del medio, que todo lo que entra sale y todo lo compartido es más divertido. Se dice que hay tres tristes tigres comiendo trigo en un trigal, una aguja en un pajar y ciento volando; y como bien dijo Herodes oídos sordos. Dicen que había tres cerditos y tres casas y que soplando, soplando desnudaron a los tres mosqueteros y los convirtieron en geishas. Dicen, también, que dos son equilibrio y que con tres la balanza se balancea, aunque no hay mal que por bien no venga porque más vale prevenir que curar. Sin embargo que más da... Si todo lo que sube baja, todo lo que empieza termina y todo lo olvidado... Algún día se recordará. Y por mucho que diga que quiera tener un nosotros, y que me traumatice por no conseguirlo, en el fondo, sé que soy feliz por el mero hecho de estar luchando a viento y marea para ser feliz con ella, porque yo no busco chicas fáciles, sino chicas que fácilmente me hagan ser feliz.''

Ella se merece...



Y ella se merece más de una sonrisa, un corazón que la quiera, que le deje su hombro para llorar, para estar en los momentos malos...

En los difíciles, para decirle lo guapa, perfecta y alegre que está siempre, aunque sepamos que ese día no iba lo más guapa que es, y lo triste que está...

Un chico que le enseñe a ir despacio, lentamente para que se dé cuenta de la vida, de sus pequeños detalles, de las cosas ocultas e insignificantes...

De que cada ventana que se cierra, hay una puerta que se abre, que no hay mal que por bien no venga...

Que no todos los sueños son imposibles, solo necesitas un poco de fé, y de esfuerzo, y lo sabes. Que un día te puedes levantar decaído, y otro muy alegre, lo mejor de ti mismo, pero; ¿sabes? Suele ser por ti por lo que estoy alegre.

Quizás no sea el adecuado para ti, pero es normal, nunca encajo con nadie. ¿La razón? Suelo ser diferente , único y extremadamente complejo.

Me hacías sonreír lo reconozco, creer en mi mismo, en lo que merezco, y en lo que soy. Hasta en darle sentido a días insignificantes, a levantarme por las mañanas. saborear tu foto imaginando la de cosas que me puedo estar perdiendo al no estar contigo, como si fuera el desayuno.

Que no te puedes creer, que una clase de matemáticas da para pensar en tantas cosas, en tener que escribir un texto, porque la razón es que te quiero tanto, y que no puedo parar de pensar en ti.

Y puedes pensar que no soy perfecto, pero lo realidad es así, yo también lo pienso..

Pero cada vez que pienso en mí, es por ti. Pienso que no soy perfecto, pero mis defectos y cualidades se unen para hacerte feliz a toda costa.

¿Lo consigo? No lo sé, pero cada vez que me decías lo feliz que estabas, había una parte de mí que me hacía ser único e inigualable.

Tendrás miedo de arriesgarte y salir perdiendo, pero ¿quien te dice que si no arriesgas no sabes si funciona?